El percance ocurrió en la carretera Zacapoaxtla–El Mirador, donde una motopatrulla con número económico M-02 terminó impactándose contra una pipa de gas de la empresa Soni Gas, el oficial lesionado fue trasladado de urgencia a un hospital con diagnóstico de fractura en el tobillo izquierdo y posible hemorragia interna, permaneciendo en estado delicado. Testigos señalaron que el uniformado presentaba signos de ebriedad, situación que desató críticas por la falta de control sobre los servidores públicos encargados de resguardar el orden.

Las unidades involucradas fueron aseguradas y trasladadas al corralón municipal, mientras el ayuntamiento emitió un comunicado en el que aseguró que se lleva a cabo una investigación para esclarecer lo ocurrido, sin embargo, el hecho se suma a cuestionamientos previos contra la corporación, donde los señalamientos de abuso de poder y negligencia han sido constantes en el último año.

Entre los antecedentes destaca un altercado registrado en Diciembre de 2024 durante un operativo conjunto de la Marina y la Policía Municipal en el acceso sur de Zacapoaxtla donde un elemento de la Marina encañonó a dos ciudadanos que se trasladaban en una camioneta, lo que generó un conato de enfrentamiento con gritos y empujones, y obligó a liberar la unidad para evitar que la situación escalara.

En Junio de este año también se registraron cambios internos cuando fue relevado el entonces director de Seguridad Pública, Teniente Juan Alberto Domínguez, señalado por irregularidades en el cumplimiento de sus funciones, en su lugar llegó el Teniente de Corbeta Manuel Alejandro Alejandre, designado por la Secretaría de Marina. Estos movimientos respondieron a la presión generada por los escándalos en el área, pero no evitaron que nuevas denuncias y hechos de indisciplina continuaran afectando la imagen de la corporación en Zacapoaxtla.

Asimismo, en Septiembre comerciantes ambulantes acusaron a policías municipales de destruir intencionalmente su mercancía durante operativos, además de amenazarlos y usar lenguaje ofensivo en su contra, situación que derivó en que los afectados interpusieran quejas formales sin obtener respuesta hasta el momento.